//= $monet ?>
La joven madre llevaba mucho tiempo mirando la polla de su hijo y éste se aprovechó de ello. Cuando no había nadie más en la casa la engañó fácilmente para tener sexo. Y según veo, a esta hembra hambrienta no le importó dejarle ver sus encantos. Solo que ella no esperaba que él se acercara tanto a su culo tan rápido. Pero fue una venganza por su lujuria.
Enseguida se ve que la joven sigue tratando de satisfacer sus deseos, pero al mismo tiempo acaricia hábilmente el cuerpo de su pareja. No en vano la chica se abre de piernas ante el chico, que luego se muestra tan cariñoso con ella.